Carnaval está a la vuelta de la esquina, y con él le acompañan las máscaras, los disfraces, el maquillaje, la ilusión de nuestros pequeños y los desfiles.

Para hacer de esta tradición un día mágico para tu hijo y para ti, te propongo

4 consejos útiles para encontrar un disfraz alineado con la crianza respetuosa.

  1. Evitar estereotipos

La “hipersexualización” de los disfraces es una realidad. Acaso una enfermera, policía, bombero ¿van con mini falda y escote a trabajar?

Y no sólo lo encontramos en los disfraces de adultos, sino también en los de niños. Sin ir más lejos, en 2017 Ada Colau (alcaldesa de Barcelona) denunció esta situación.

En este sentido, es importante:

Por un lado, evitar disfraces sexualizados tanto para adultos como para niños.

Y, por otro lado, ofrecer variedad de alternativas para no caer en los roles tradicionales de mujer princesa y hombre super-héroe.

 

  1. Sugerir sin imponer

Seguro que como madre/padre se te ocurren miles de ideas divertidas para el disfraz de tu hijo. Sin embargo, es muy importante preguntar, proponer y dialogar antes que imponer.  Debemos tener siempre en cuenta la opinión de nuestro hijo que, al fin y al cabo, es el que tiene que llevar el disfraz y, por lo tanto, se debe sentir cómodo con la elección.

Sugiérele qué le parecen tus ideas y si no le encajan, es importante dialogar hasta encontrar alternativas.

Por otro lado, nunca debemos presionarlo para disfrazarse si no quiere.

 

  1. Deja volar la imaginación

Sé original y creativo. Puedes aprovechar esta ocasión para pasar un buen rato con tu hijo. Sentaros juntos a pensar disfraces distintos y únicos, id a comprar los materiales y ofrécele la oportunidad para ayudarte a hacerlo.

 

  1. Seguridad y comodidad

Por último y no por eso menos importante, ten en cuenta la calidad de los materiales. Evita aquellos tejidos inflamables y asegúrate de que maquillaje no le causará ninguna reacción alérgica (para ello puedes pintarle una pequeña zona de la piel unos días antes y observar la reacción).

Además, es importante probar el disfraz para asegurarse de que tu hijo se siente cómodo, puede moverse con libertad y no le molestan etiquetas o hilos interiores.